José Antonio Meléndez Rodríguez nació en Nicaragua el 9 de enero de 1962 sin brazos, ello como consecuencia de que durante el embarazo a su madre le recetaron Talidomida, un fármaco que comercializó una firma alemana entre 1957 y 1963 como sedante y como calmante de las náuseas, porque se creía que no tenía efectos secundarios, hasta que se comprobó que miles de niños en todo el mundo nacieron con la misma carencia que Tony o con las extremidades superiores más cortas de lo normal, por lo que fue retirado del comercio.
A sus pocos años lo trasladaron a Los Ángeles, en los EE.UU., donde le colocaron brazos artificiales. Pero dejó de utilizarlos hacia los diez años, manifestando que no se sentía cómodo con ellos y que era mucho más fácil para él utilizar sus pies para realizar muchas tareas, como escribir, por ejemplo.
También de muy niño comenzó a interesarse por la música y empezó a experimentar con los teclados. Recién al comenzar la escuela secundaria descubrió la guitarra y la armónica, transformándose en músico y cantautor.
Hacia 1989 grabó su primer disco, al que le siguieron mu-chos otros. Recorrió prácticamente todos los EE.UU. con su música y también visitó más de 40 países.
Además, suele recorrer universidades y otros lugares para dar charlas motivacionales, destacando que la discapacidad existe, pero que, teniendo en cuenta las capacidades que cada uno tiene, se puede seguir soñando y logrando que algunos de esos sueños se cumplan. Tony está casado, tiene dos hijos y es feliz con su familia y haciendo lo que más le gusta: tocar y cantar.