Una usuaria de la red social tildó de «horrible» a Juan, quien tiene 5 años y una extraña discapacidad que afecta su desarrollo físico y mental.
Que chico más horrible», fue la frase que resaltó dentro de un mar de casi 1000 likes y más de 200 comentarios positivos en una foto del usuario de Instagram @beingamomblog, de la blogger Pilar Lipera. La agresión iba dirigida directamente a quien era el protagonista del posteo, su hijo mayor Juan, de 5 años, quien padece del síndrome de Coffin-Lowry. Esta extraña enfermedad genética afecta su desarrollo físico y mental, afectando su capacidad de habla, el correcto funcionamiento de sus órganos y músculos.
Pero la desagradable sorpresa de Pilar por el comentario negativo no terminó ahí. En su cuenta de Instagram, que usa a modo de blog sobre maternidad, Pilar comparte a través de distintos posteos, sus experiencias y anécdotas como madre de tres hijos: Juan, Milagros, de 4 años, y Simón, de 6 meses. Justamente, en un video de este último, la misma usuaria comentó: «Por lo menos este bebé es lindo, no como el otro feo».
«Nos metimos en su usuario y vimos que era una mujer que se dedicaba sistemáticamente a insultar y burlarse de personas con discapacidad. No entiendo como alguien usa su tiempo libre para hacer esta maldad», dice Lipera, de 32 años, quien luego borro ambos comentarios y bloqueó al usuario.
Conversando de lo sucedido con su amiga Florencia Zet, quien también tiene un blog sobre maternidad llamado @florazet, decidieron no quedarse de brazos cruzados y hacer algo al respecto. «Creíamos que había que parar esta impunidad anónima de insultar al otro por deporte. Pero también entendimos que esto no se solucionaba borrando los comentarios o bloqueando a los usuarios, sino enfrentándolos», afirma Lipera, que ejerció varios años como abogada antes de dedicarse tiempo completo a sus hijos.
Subió un nuevo post con una foto de Juan acompañado por un texto. «Los que me conocen saben que siempre doy pelea por lo que considero justo. Me niego a que la gente que no tiene otra misión en la vida más que provocar sufrimiento, sobre todo a costa de indefensos, gane siquiera una batalla», aseguraba el texto que concluye con los hashtags #noalbullying y #noalaviolencia.
De esta forma, dieron comienzo a una campaña que busca concientizar a través de las redes sociales, sobre la impunidad que existe, de parte de algunos usuarios de estas, a la hora de hacer comentarios que pueden considerarse discriminatorios.
Hasta el momento han conseguido una gran repercusión, aumentando su número de seguidores y logrando que varias bloggers y celebridades, como el periodista Sebastián Vignolo, se sumaran a la iniciativa. Pero para las colegas de Instagram, lo más importante fue ver el impacto que generaba la campaña en las madres y en las personas que sufrieron la discriminación viral en carne propia, como es el caso del usuario@lalidodorico:
Aprovechando el momento, Pilar busca que se instale la temática de la ciber discriminación en el ámbito legal argentino. Por eso, invita a sus seguidores a sumarse a la petición de firmas para reglamentar la ley de bullying en Argentina a través de change.org. «La idea no es quedarse con lo negativo. Hay que destacar toda la gente que nos apoyó y tratar de cambiar las cosas para bien», concluye Pilar.